El Parque Natural de las Hoces del Río Riaza es conocido porque en los años setenta el naturalista Félix Rodríguez de la Fuente creó dentro de sus límites el primer refugio de aves rapaces que hubo en la Península Ibérica. Se extiende entre Montejo de la Vega y el embalse de Linares del Arroyo, a lo largo de 12 kilómetros del curso medio del río Riaza, que tiene su nacimiento en las inmediaciones del puerto de la Quesera. Nuestros compañeros van a recorrerlo en este día que cierra el año, acompañados de un perro del lugar que se les añadió al comienzo de la ruta.
A mitad de recorrido se pasa por las ruinas del convento románico de San Martín del Casuar, que en algunas fuentes se dice que perteneció a los templarios. Sea o no cierto, se halla enclavado en un paraje pintoresco de indiscutible belleza.
En el tramo final de la ruta se desata la lluvia con fuerza. Tras la mojadura y el consiguiente destemple, no hay nada mejor que una ducha de agua caliente. Pero dado que la ruta fue lineal, lo primero es ir en busca de los coches que se quedaron en el punto de partida.
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