El Fontañán (1.632 m.) , pese a su escasa altitud, es una hermosa montaña que cierra el concejo de Gordón por el sur. Puede ascenderse desde La Pola de Gordón, Los Barrios de Gordón, La Robla, Olleros de Alba, etc. Por el noreste presenta la única zona abrupta, con unos cortados que caen sobre Nocedo de Gordón. Al ser el contrafuerte más al sur de la Cordillera Cantábrica en esta zona, ofrece unas vistas espléndidas de Peña Ubiña, las Tres Marías, el Brañacaballo, la Montaña Palentina, el Teleno, etc., así como la inmensa llanura que se extiende hacia el Duero.
A un histórico dirigente comunista asturiano
De entre las distintas opciones posibles, el senderista ha optado por iniciar la subida en La Pola de Gordón (1.007 m.), a donde ha llegado desde León en el tren regional. A las afueras del pueblo se encuentra el cartel informativo del sendero local SL LE-39, que están señalizado con marcas de pintura verde y blanca, así como con otras marcas de pintura azul que no se sabe a qué tipo de homologación corresponde. Hay también postes de madera hincados en el suelo e incluso unos postes más altos con letreros en algunos cruces de caminos. Se asciende por el valle que forma el arroyo de Villojo hasta abandonarlo para girar en dirección sur. Se atraviesan robledales y hayedos para finalmente alcanzar la amplia loma que nos lleva a la cumbre, donde se aprecian algunas trincheras excavadas en la roca y restos de fortines utilizados durante la guerra. Fueron casi 6 kms., solo de subida, con unos 700 m. de desnivel. Aunque era posible completar una ruta circular, el senderista prefirió ser conservador y optó por descender siguiendo el mismo itinerario de la subida.
Una trinchera
La Pola de Gordón
Se localiza en el Alto Bernesga, a 34 kms. de la ciudad de León.
Es cabeza de un municipio que incluye otras 16 entidades de población, entre ellas Villasimpliz, Santa Lucía, Geras, Buiza, Los Barrios de Gordón, Nocedo de Gordón, etc.
La principal actividad económica del pueblo hasta el siglo XIX y principios del XX fue la ganadería, pero la aparición y el desarrollo de la industria minera transformaría profundamente toda la comarca.
Durante la guerra, la localidad quedó devastada, lo que obligó a reconstruir muchos edificios, entre ellos el ayuntamiento.
Bibliografía
La Cordillera Cantábrica. Tomo I: Cuenca del Bernesga. Por Isidoro Rodríguez Cubillas. Editado por la Federación Castellano-Leonesa de Montaña. Ver páginas 104, 105 y 106.
No hay comentarios:
Publicar un comentario